Benicàssim sigue con un claro objetivo: Alcanzar la "deseada" cifra de 20.000 habitantes. Un reto que ya está más cercano porque tan solo le quedan 1.200 empadronamientos aproximadamente para redondear este número de ciudadanos. El éxodo de la ciudad al mar para pasar el confinamiento impulsó que ciudadanos, sobre todo, madrileños y aragoneses hayan apostado por certificar su residencia en Benicàssim.
El presidente provincial ha abordado las dos principales problemas que requieren dos soluciones diferentes, el éxodo y el envejecimiento de sus vecinos
Marisol Linares. Ex diputada Corts Valencianes.
El verano finaliza dando sus últimos coletazos de calor que este año han sido más intensos que nunca y...