La crisis económica, poco dinero en los bolsillos y un ambiente mojado dejaban terrazas vacías o semivacías en días de fiesta donde generalmente no cabe un alfiler.
Con el ‘Magdalena Vitol’ gritado por las reinas de las fiestas, Cristina Pastor y Laura Turch, desde el balcón del ayuntamiento se puso el broche final a las fiestas.
El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, ha querido destacar que "han sido unas fiestas tranquilas" debido a la reducción de incidentes respecto a las fiestas del año pasado, y ha remarcado el éxito participativo de los ciudadanos pues "pese al acto de aparición de la lluvia en algunas jornadas, se han podido celebrar con gran éxito la inmensa mayoría de actos".
El público esperaba más de la mascletá y quizá por eso se quedó frío, e incluso decepcionado, con un disparo que intentaba combinar todos los efectos posibles.