Tras dispararse la incidencia, los ciudadanos de la provincia quieren mayor seguridad para evitar contagios en estas celebraciones
M.G./Castellón Información
La proximidad de las fiestas dispara la venta de test de antígenos en las farmacias de la provincia de Castellón.
La Navidad se acerca y eso provoca que vuelvan las comidas y cenas en familia, de trabajo y con amigos. Un hecho que, en plena pandemia, nos lleva a tomar más precauciones que hace unos años cuando todo transcurría con total normalidad.
De esta forma, y según explica a Castellón Información el propietario de una botica de Benicàssim, "estamos vendiendo de media unos veinte al día". Un hecho que supone un notable incremento respecto a meses anteriores cuando la pandemia estaba controlada gracias a la vacunación exprés del verano.
Tras dispararse la incidencia, en municipios como Vila-real y la capital de La Plana, las ventas son todavía mayores. Así lo explica el propietario de una farmacia del centro de Castelló: "A más incidencia y más población, más miedo de contagio y por tanto más ventas". Explica además que este jueves "hemos recibido una remesa a primera hora y se han vendido todos, mañana tocará pedir más".
Así las cosas, aunque la incidencia de Castellón esté por encima de los 500 puntos, los castellonenses no quieren sustos y según parece, quieren actuar con responsabilidad en sus encuentros navideños.