La multinacional confirma que ante el aumento vertiginoso de los precios tendrá que pagar un sobrecoste energético que supera los 100 millones de euros
La multinacional UBE Corporation Europe ha presentado los resultados fiscales del ejercicio 2021, que ha estado marcado por el comienzo de la invasión de Ucrania, el aumento vertiginoso de los costes energéticos, los ajustes de la demanda y la volatilidad en los precios de las materias primas.
El mayor valor de la producción como consecuencia del aumento general del coste de las materias primas y una demanda sostenida durante buena parte del año 2021 han propiciado un récord en la cifra de negocios de UBE en su división de Europa y Latinoamérica, que alcanzó los 544 millones, y una recuperación del Ebitda y el beneficio después de impuestos, 60 y 34 millones respectivamente, por debajo del máximo alcanzado en 2018.
El presidente de UBE Corporation Europe, Bruno de Bièvre, en relación a la evolución de los mercados, ha explicado que “la bajada es generalizada”, pero aquellos ligados a la transformación agroalimentaria, la producción agrícola o la industria química, han tenido un comportamiento más positivo. En cambio, el sector de la automoción no ha recuperado su fortaleza, afectando negativamente a las ventas de polímeros y compuestos especiales. “Es cierto que actualmente el sector de la automoción está atravesando una situación difícil, pero ya nos encontramos ante una ligera recuperación después de los dos años de pandemia”, apunta Bruno de Bièvre.
El final del ejercicio de 2021, el pasado 31 de marzo, ha estado marcado por el comienzo de la invasión de Ucrania, el aumento vertiginoso de los costes energéticos, y la volatilidad en los precios de las materias primas. “Las medidas para contrarrestar esta situación pasan por invertir en eficiencia energética, descarbonización y sostenibilidad medioambiental”, declara el presidente de UBE.En una situación de incertidumbre general por la evolución de la economía global, la industria manufacturera parece estar llegando a su límite de capacidad para asumir las subidas de los costes de las materias primas. Pese a esto, desde UBE aseguran: “Confiamos en nuestra solidez empresarial, basada en la prudencia en las inversiones y en una gestión orientada a nuestros clientes”.
Exportaciones e inversiones
Durante buena parte del ejercicio 2021 la progresiva reducción de la incidencia del Covid ha permitido estabilizar la actividad productiva y reactivar la participación en ferias y los viajes de promoción comercial. Las exportaciones han absorbido un 69% en UBE Corporation Europe y un 52% en Repol, siendo Europa el área geográfica donde se dirigen mayoritariamente.
Las inversiones alcanzaron los 23 millones, dejando el total del trienio 2019-2021 en 53 millones, ligeramente por debajo de los 57 previstos. Para el periodo 2022 a 2024 UBE cuenta con un plan de inversiones a medio plazo por importe de 95 millones en las dos plantas productivas que el grupo tiene en la provincia de Castellón, destinándose el 25% a proyectos de seguridad y mejora ambiental.
Al término del ejercicio el grupo daba empleo directamente a 613 personas (559 en la provincia de Castellón) con un 24% de personal femenino y más de un 98% de contratos indefinidos. Adicionalmente, a lo largo del año fiscal 2021 UBE ha subcontratado servicios con una media equivalente a 330 empleos a jornada completa.
Sobrecoste multiplicado por diez
Por otro lado, como ha comentado Bruno de Bièvre, el aumento vertiginoso de los costes energéticos y la volatilidad en los precios de las materias primas “es una de las grandes amenazas para UBE”. Daniel Loyarte, director de Finanzas, Legal y Planificación de UBE Corporation Europe, afirma: “ El sobrecoste energético que tendremos que pagar este año respecto a ejercicios anteriores sobrepasa los 100 millones de euros”.
"El año pasado se había multiplicado por tres, y este año el sobrecoste se multiplicará por diez", ha comentado el director financiero. Pese a esta situación, el grupo químico descarta acometer paradas productivas o Ertes. "Con las inversiones en la planta en los últimos años tenemos más flexibilidad que nos permite modular la actividad y adaptarla a los precios de la energía".