El agente se encontraba fuera de servicio pero intervino para detener el robo y fue arrollado por un vehículo en la persecución
Hay personas que no miran el reloj, ni piensan si llevan puesto el uniforme. Cuando ven que algo de lo que ocurre a su alrededor incumple la ley, intervienen, y a veces salen muy mal parados.
Este es el caso de un agente de la Guardia Civil de Castelló. Estaba en un centro comercial del entorno de la ciudad con su familia. Realizaban unas compras y era un momento de 'fiesta'. No estaba de servicio. Pero se percató de que se estaba produciendo un robo en uno de los establecimientos, y su deber fue más allá de cualquier otra cosa.
Actuó para evitar el robo y se lanzó en persecución de la persona que lo había cometido. Y tuvo tan mala suerte que, cuando corría detrás de esa persona fue arrollado por un vehículo que circulaba por el entorno de esta superficie comercial.
El agente está ingresado en un centro hospitalario y el pronóstico es grave. Desde este periódico nos quitamos el sombrero y deseamos que pueda salir de este trance para disfrutar del aplauso de una sociedad que debe su seguridad y su bienestar a agentes tan valientes como este guardia civil.
(Imagen de archivo)