Los inquilinos, que fueron realojados tras el peligro de derrumbe en junio, han podido entrar en sus casas tras el apuntalamiento del inmueble
El edificio de la calle Gobernador, 44, de Castelló continúa tapiado después de que el pasado mes de junio los inquilinos del mismo tuvieran que abandonar sus pisos por peligro de derrumbe. Los operarios iniciaron las labores de apuntalamiento el 26 de julio con el objetivo de reforzar la seguridad del edificio y que los inquilinos pudieran regresar para recoger sus pertenencias.
Y así ha sido. Esta misma semana han comenzado a verse a la entrada del edificio algunos de los inquilinos que tuvieron que abandonar sus pisos ante la alarma por un posible derrumbamiento. Desde este pasado lunes, las familias, en compañía de un bombero, han podido volver entrar a sus casas para recuperar sus enseres que aún continuaban en el interior del inmueble. Cabe recordar que todas ellas fueron realojadas ante la inhabitabilidad del edificio.
Por el momento, y tal y como ha informado el propietario del edificio a Castellón Información, “todavía no conocemos el alcance del deterioro del edificio”. El informe técnico elaborado por el ingeniero y el arquitecto encargados de las tareas de apuntalamiento dilucidará en las próximas semanas si, finalmente, el inmueble admite una reforma o, por el contrario, es necesario su derribo.
La fachada del edificio
Cabe recordar que la fachada del edificio de Gobernador, 44, presenta aplicaciones cerámicas con diversos paneles y frisos de azulejos que responden a un estilo neorenacentista de fondo amarillo. La misma forma parte de la Ruta de la Cerámica con la que el Ayuntamiento da a conocer a vecinos y visitantes los ‘tesoros’ de la ciudad, que recorren numerosos inmuebles.
Sin embargo, según ha asegurado el propietario, los frisos de la fachada no son elementos protegidos, por lo que en el caso de que se precise la demolición, “se efectuaría del inmueble completo, incluida la fachada”.