Inmobiliarias de Benicàssim, Oropesa del Mar y Peñíscola no logran mantener la ocupación de la pasada temporada pese a bajar precios
La Costa Azahar atrae cada verano a miles de turistas y visitantes, enamorados de la climatología mediterránea, la exquisita gastronomía y los más de 120 kilómetros de majestuosas playas y recónditas calas. Algunos de los destinos que cada año ganan más adeptos son Benicàssim, Oropesa del Mar y Peñíscola. De hecho, son muchos los castellonenses que aprovechan los meses de verano para desconectar y se 'mudan' a su segunda residencia en busca de sol y playa.
Sin embargo, el sector inmobiliario dedicado al alquiler vacacional vive este verano una temporada del todo "atípica". Algunas de las inmobiliarias consultadas explican que este año "es muy diferente al anterior". En este sentido, se muestran muy sorprendidos: "No esperábamos este bajón y no damos con una explicación". Algunos apuntan a la subida de precios debido a la inflación, otros a que el turista internacional ha preferido quedarse en su país y el nacional viajar fuera. Entre los motivos destacan también la celebración de elecciones generales del 23J que ha provocado numerosas cancelaciones.
Y para hacer frente a esta inesperada situación, muchas inmobiliarias se han visto obligadas a disminuir el precio hasta en un 40%. En Peñíscola, por ejemplo, el alquiler de un apartamento con capacidad para seis personas, situado frente a la playa, con piscina y parking privado, para la primera semana de agosto, cuesta ahora 800 euros; cuando antes su precio era de 1.100. "Estamos peor que después de la pandemia", sentencian.
Un escenario similar se vive en Benicàssim, donde también se muestran sorprendidos: "No entendemos esos números de ocupación que se están publicando porque la situación está bastante complicada, incluso en restaurantes de la zona que también han notado un notable bajón", explican.
Y la angustia es compartida por la mayoría del sector de alquiler vacacional, también en Oropesa del Mar. "Los niveles de ocupación han bajado un 15% con respecto al verano anterior. En agosto tenemos apartamentos vacíos y es algo que no nos había pasado nunca. Tan solo tenemos completa la semana del 19 al 26, pero porque los precios bajan un 40%", indican, a lo que añaden que "todo lo que no se ha alquilado en junio y julio ya no lo recuperamos; para hacerlo, tendríamos que incrementar el precio un 50%".
Con todo, algunos se muestran esperanzados cara al mes de agosto, cuando esperan "aumentar las reservas, sobre todo la primera quincena". Eso sí, muchos de ellos con una bajada de los precios para poder mantener la ocupación.
¿Cuánto cuesta alquilar un apartamento en plena temporada alta?
Localidades como Benicàssim, Oropesa del Mar y Peñíscola se convierten en verano en auténticos hervideros turísticos y muchas veces es casi imposible encontrar un apartamento durante la temporada alta. En la costa benicense, los precios oscilan entre los 144 y los 315 euros la noche, con posibilidad de estancias cortas y largas. Entre la oferta disponible, encontramos apartamentos con un dormitorio y 45 metros cuadrados, hasta otros con tres habitaciones y casi 100 metros cuadrados por 1.260 euros del 1 al 6 de agosto.
En el caso de Oropesa del Mar, los precios son muy similares. Para estancias de una semana en un apartamento de tres habitaciones, los precios van desde los 805 euros hasta los 1.417. El precio varía, cómo no puede ser de otra forma, dependiendo, sobre todo, de la localización del inmueble, por lo que cuanto más cerca de la costa, más tendremos que desembolsar.
