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Afortunadamente la gente cada vez está más concienciada con la conservación del entorno. Al menos así lo demuestran los datos proporcionados por la Guardería Rural del Consorcio del Paisaje Protegido del Río Mijares durante este 2016. De momento los guardias que vigilan el paraje han encontrado 18 puntos ilegales de vertidos de escombros. En 2015 se denunciaron 28 localizaciones. Los datos apuntan a una disminución progresiva de estos hechos ilegales que causan fuertes sanciones a los infractores. El año 2013 se registraron en el paraje protegido 34 y el año siguiente 41. Si dejamos de lado el excepcional año 2014, durante los últimos 8 años ha habido una disminución progresiva de estos hechos que ensucian y contaminan la desembocadura del Mijares. La Guardería del Consorcio que vigila el paraje durante los 365 días del año tiene la potestad de denunciar cualquier tipo de infracción administrativa en el paraje protegido como así lo indica el artículo 34 de la Ley 5/2014 de Seguridad Privada.
Los escombros a los eco parques
La ribera de los ríos y las ramblas, por norma general, ya no son ese lugar alejado y solitario de la ciudad donde depositar los escombros procedentes de las obras de restauración de los hogares particulares o industriales. Hace años se había instaurado la mala costumbre de lanzar al río todo aquello que ya no servía en casa como muebles viejos, electrodomésticos, neumáticos, vidrios, azulejos rotos ... Periódicamente los ríos crecidos por el régimen mediterráneo del otoño solían llevarse mar adentro todas esos desechos abandonados a orillas de los ríos y ramblas. Era una manera de hacer desaparecer las vergüenzas caseras e industriales de los más desaprensivos. En la actualidad existen eco parques donde la ciudadanía puede depositar todos los escombros particulares procedentes de obras de reformas o bien los electrodomésticos, los muebles u otras cosas que ya no se utilizan. Las tres poblaciones que forman parte del paraje protegido del Mijares como son Burriana, Almazora y Vila-real tienen eco parques al servicio de los ciudadanos para que puedan deshacerse de sus desechos y escombros. Desgraciadamente todavía hay gente que prefiere lanzar estas cosas a los ríos y arriesgarse a una multa contundente.
El protocolo ante los escombros
Azulejos y ladrillos rotos procedentes de obras de reforma del hogar, cristales, restos de poda, botes de pintura vacíos pero también a veces llenos y maderas forman parte de los elementos más comunes entre los escombros arrojados al río Mijares. La primavera es el periodo del año donde más aumentan estos hechos ilegales, según apuntan los guardas del Consorcio. Tal vez porque los ciudadanos se animen a iniciar las obras de restauración particulares después del invierno. Pero no todos los escombros encontrados hasta ahora tienen una procedencia más bien familiar o particular. En 2010 se produjo el vertido más grande localizado en el paraje hasta que existe servicio de Guardería. Los guardas encontraron el contenido de dos camiones de escombros abandonados en una ladera del río.
Las investigaciones realizas por la Guardería del Consorcio, acabaron por descubrir a la empresa de reformas responsable del hecho lamentable. ¿Qué pasa cuando la Guardería localiza un derribo? Lo primero que hacen es llenar una ficha donde se apuntan todas sus características. Después posicionan su localización exacta con un GPS, hacen varias fotografías y avisan del hallazgo al servicio de mantenimiento del Consorcio para que retiran los escombros de manera inmediata. Si los vertidos tienen carácter delictivo porque se trata, por ejemplo, de derrames de aceites de motor o industriales, pinturas y otros productos contaminantes avisan al SEPRONA, Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil para que investigue los hechos y encuentre a los culpables .
