El conseller de Hacienda y Modelo Económico ha destacado que Fedea reconoce en su informe el maltrato a los valencianos
Castellón Información
El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler ha manifestado que el informe de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) sobre la descomposiciòn de saldos presupuestarios de las comunidades autónomas, en el periodo entre 2014 y 2018, hecho público este martes "está reconociendo la infrafinanción estructural que sufrimos los valencianos porque tenemos exactamente las mismas obligaciones que las otras comunidades autónomas y disponemos para gestionar esos servicios los menores ingresos que establece el sistema".
"La Comunitat Valenciana se ve obligada a aumentar su déficit y recurrir al FLA no porque tengamos un mayor nivel de gasto, sino porque no recibimos los ingresos que nos corresponden. Esa es la única lectura que se puede hacer del informe de Fedea", ha indicado Vicent Soler.
El conseller de Hacienda recuerda que "en un reciente informe, la propia Fedea certificó que los gastos siguen aumentando en la Comunitat Valenciana por debajo de la media de las comunidades autónomas, un 3,7%, frente al 3,8%, mientras que los ingresos han crecido en la Comunitat Valenciana menos de la mitad que en la media de las comunidades autónomas, un 1,2% en el caso valenciano, frente al 2,8% de la media autonómica".
Una de las conclusiones del informe de Fedea es que el conjunto de las CCAA no ha realizado ningún esfuerzo de consolidación fiscal entre 2014 y 2018, ya que toda la mejora del saldo presupuestario se debió a la mejora del ciclo económico. En base a la conclusión anterior hay que tener en cuenta que la mejora del saldo presupuestario puede realizarse desde dos perspectivas. Por un lado a partir de un ajuste en los gastos, y, por otra, con medidas fiscales que generen mayores ingresos.
Respecto a la primera de las opciones, el conseller de Hacienda ha señalado que "el gasto del conjunto de comunidades autónomas de régimen común en 2018 es similar al que realizaban hace diez años". Esto, unido a que las necesidades de gasto, han aumentado considerablemente por envejecimiento de la población, dependencia y ayudas sociales, ha provocado, según Soler, que "el gasto por unidad de necesidad haya caído en estos años y en concreto, para mantener el estado de bienestar existente en 2007 (uno de los objetivos que marca el vigente sistema de financiación), las comunidades de régimen común tendrían que haber gastado 4.200 más en 2018".
Desde la perspectiva de los ingresos, si bien es cierto que alguna comunidad no ha ejercido al alza su ejercicio de la capacidad normativa, en general las autonomías sí que la han ejercido en aquellas figuras donde han podido actuar, principalmente en el IRPF. Sin embargo, Vicent Soler destaca que "la subida de tipos impositivos en impuestos como el IVA y los impuestos especiales donde las comunidades no tienen capacidad normativa han privado al conjunto de las autonomías de régimen común de más de 15.000 millones cada año a través de una compensación establecida en el sistema de financiación".
Infrafinanciación y déficit estructural
A nivel individual el informe de Fedea señala que en 2018 todavía quedaba pendiente un importante ajuste estructural en la Comunitat Valenciana del 1,5% del PIB y en la Región de Murcia del 1,4%. A este respecto, el conseller de Hacienda se lamenta de que "el informe de Fedea no haga mención alguna a que precisamente estas dos comunidades son las más infrafinanciadas en el vigente sistema de financiación". En concreto, Soler alude a que "en una situación sin infrafinanciación, el déficit estructural de la Comunitat Valenciana en 2018 descendería hasta el 0,3% del PIB, situándose al nivel medio del conjunto de comunidades".
El informe de Fedea también destaca que desde 2014 el déficit estructural de la Comunitat Valenciana ha aumentado en 0,4 puntos porcentuales de PIB. Este incremento del déficit estructural es según el conseller de Hacienda "consecuencia del objetivo del Consell de converger hacia el gasto por habitante del conjunto de comunidades de régimen común". En 2014 el gasto público por habitante valenciano era un 6% inferior a la media de las autonomías de régimen común. La mayor intensidad en el gasto social, en sanidad, educación, dependencia y servicios sociales en la Comunitat Valenciana ha provocado que en 2018 el gasto per cápita ya solo sea un 1,5% inferior.
Reforma del sistema de financiación
Por otra parte, Vicent Soler ha mostrado su satisfacción por el desbloqueo que ha posibilitado la investidura de Pedro Sánchez y ha asegurado que "los expertos de la Generalitat trabajan ya en la preparación del proceso negociador para la reforma del sistema de financiación autonómico, que el presidente del Gobierno se ha comprometido a iniciar de inmediato".
El conseller de Hacienda ha manifestado al respecto que la reforma del sistema de financiación "no debe abordarse como un debate entre territorios, sino con el objetivo de mejorar el funcionamiento del estado del nienestar, ya que de lo que se trata es de que los ciudadanos cuenten con los mismos recursos y oportunidades con independencia del territorio donde vivan".
Otro de los aspectos esenciales a la hora de abordar la reforma del sistema hace referencia, según Soler, al actual desequilibrio vertical en el reparto de recursos, por lo que es necesario reordenar esos recursos en favor de las comunidades autónomas para salvar el estado del bienestar, con un reequilibrio vertical de los recursos fiscales".
Para el conseller de Hacienda, una premisa básica a la hora de plantear la reforma del modelo es la de que "el dinero no es del Gobierno, sino del contribuyente, que paga sus impuestos para tener unos servicios públicos adecuados y como esos servicios están en gran parte en manos de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos, se hace necesario un cambio del marco legal vigente".
Soler ve además necesaria "la aplicación efectiva del principio de lealtad institucional entre el Estado y las comunidades autónomas para que las nuevas necesidades de gasto vayan acompañadas de los recursos correspondientes". Y además, en este mismo sentido, ha de acometerse, según el conseller de Hacienda "un proceso de armonización fiscal, que es una condición necesaria para que cualquier sistema de financiación autonómica funcione de manera eficiente y equitativa".
Compensación de la deuda histórica
Asimismo, Vicent Soler ha asegurado que "el nuevo modelo de financiación debe ser sencillo, transparente y predecible, lo que permitirá la planificación a medio y largo plazo y coadyuvará a una mejor consolidación fiscal en las comunidades autónomas".
Y hasta que pueda entrar en vigor un nuevo sistema de financiación, el conseller de Hacienda reclama al Gobierno central "la articulación de un mecanismo transitorio que permita a las autonomías que están infrafinanciadas, como es el caso de la valenciana, disponer de los fondos necesarios para cumplir con la Constitución y la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA)".
Del mismo modo, tras la aceptación tanto por parte de la comisión de expertos del Gobierno, de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal y del propio Ministerio de Hacienda de que la Comunitat Valenciana es la peor financiada de España, el conseller de Hacienda reclama que "también forme parte del debate el tema de la compensación de la deuda histórica por la infrafinanciación que hemos sufrido los valencianos durante años".