Esta nueva medida de participación ciudadana es pionera en la provincia
El reglamento se encuentra ahora en exposición pública
Clara Parra
Antes de que finalice la legislatura. Ese es el objetivo que persigue el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Vila-real respecto a la implantación de la figura del escaño ciudadano donde cualquier vecino o vecina del municipio, a través del Consejo de Participación Ciudadana, podrá tramitar propuestas y plantear preguntas a la corporación dentro de las sesiones plenarias que acoge el Consistorio una vez al mes.
Será la primera vez en la historia del municipio que esto suceda y para ello se ha tenido que aprobar una modificación del Reglamento de Participación Ciudadana que pueda regular esta nueva figura que será escogida y debatida dentro del seno del propio consejo vecinal. “Es el paso de la Democracia representativa a la Democracia participativa ya que los vecinos podrán presentar sus propuestas sin ningún tipo de politización ni interferencias sino únicamente siguiendo los pasos administrativos que el resto de formaciones políticas”, ha señalado el edil de Participación, Xavi Ochando.
De esta manera, será el Consejo de Participación Ciudadana quien, a partir de este mes de abril, ya podrá comenzar a trabajar en este asunto nombrando a un portavoz que ocupará un asiento en el pleno y presentará las propuestas o preguntas que previamente se habrán acordado en este órgano consultivo vecinal.
Tal y como explica Ochando, está previsto que hacia el 23 de abril pueda convocarse el nuevo consejo, que pasará de diecinueve a cuarenta asociaciones de la localidad representadas, donde “ya se den esos primeros pasos” que, sobre todo, estarán marcados por los trámites de exposición al público del nuevo reglamento, con el objetivo de que antes de que finalice la legislatura, es decir, a principios de mayo, pueda ya incorporarse esta figura en el debate plenario.
Decisiones vinculantes
El procedimiento que deberá seguir la tramitación de las propuestas y preguntas será, en primer lugar, el consejo participativo desde donde se enviarán al Consistorio para que cuenten con los preceptivos informes técnicos que verifiquen o no su viabilidad. Además, todas las iniciativas nacidas en el seno vecinal también deberán pasar por Junta de Portavoces o alcaldía “siguiendo el mismo filtro que pasa una moción de un partido político para que pueda ser presentada en el mismo formato para su posterior debate y votación”, ha concretado el edil.
Pero ésta no será la única fórmula de participación vecinal en los plenos ya que desde el Consejo de Participación Ciudadana, a través de un portavoz elegido por ellos mismos, se podrán presentar ruegos o preguntas previo debate en el consejo. “Ellos deberán seleccionar las preguntas que consideren de interés para la ciudadanía y descargar aquellas que puedan tener algún tipo de manipulación por parte de grupos políticos o intereses particulares”, ha asegurado Ochando.
Así, según se establece en la nueva normativa de Participación Ciudadana, el consejo vecinal deberá presentar las preguntas, a través del registro municipal del Ayuntamiento, cinco días antes de la sesión para que desde el equipo de gobierno se pueda ofrecer una respuesta o requerir algún tipo de informe o cuestión técnica.
El concejal de Participación Ciudadana ha recordado que “se trata de una nueva fórmula de apertura de la participación a los ciudadanos cuyas propuestas, quejas y reclamaciones tendrán, por primera vez, un efecto sobre la gestión municipal porque serán vinculantes”.
Ochando ha recordado que junto a esta iniciativa el equipo de gobierno también ha reactivado, durante estos años, los presupuestos participativos o el propio Consejo de Participación Ciudadana.
