Raquel Batalla López
Después de 3 años sin poderse usar la infraestructura, el Ayuntamiento de Vila-real ha llegado a un acuerdo con la Generalitat según el cual el Centro de Tecnificación Deportiva pasará a manos del consistorio, que asumirá el 100% de la gestión pese a que este no tendrá competencias en materia formativa y educativa. Es por esto que este lugar se convertirá en un espacio deportivo y no multidisciplinar como se esperaba en un primer momento. Más adelante “se podrán hacer cuestiones formativas, pero siempre con el acuerdo de la Generalitat y la universidad” apunta el alcalde.
“No se nos puede decir que no hemos actuado sobre algo que no tenemos competencia” señala el alcalde de Vila-real, José Benlloch, sobre las trabas que ha encontrado la apertura del centro. “Estamos a la espera de que Generalitat desbloquee los impedimentos que ralentizan la puesta en marcha del centro”, apuntó el primer edil, haciendo hincapié en que a día de hoy está todo “previsto y presupuestado” y que la apertura de la piscina supondrá un coste de 200.000 o 300.000 euros aproximadamente. “Desde que estamos aquí hemos disminuido el endeudamiento de un 72 a un 53%, por lo que pensamos que no pasará nada si invertimos en este proyecto, ya que los socios de la piscina supondrán un ingreso en las arcas”, manifestó el alcalde.
José Benlloch se muestra positivo ante la apertura del Centro de Tecnificación deportiva y expresa sus deseos de que este centro se convierta en “un elemento de motor económico", por lo que buscarán “todas las posibilidades para potenciarlo al máximo”.