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El Ayuntamiento en pleno ha aprobado la propuesta de Plan Económico y Financiero 2016-2017 que ayudará a recuperar la estabilidad presupuestaria perdida en los últimos años, debido a las “sentencias, empastres urbanísticos y sobres sorpresa del PP que no han dejado de llegar al consistorio”, en palabras del alcalde, José Benlloch, y del edil de Hacienda, Francisco Valverde.
El documento, que realiza un diagnóstico de la situación económico-financiera del Ayuntamiento, se basa en los números actuales y marca las previsiones del próximo año, estableciendo un calendario de acciones para cumplir con los objetivos propuestos. En este sentido, el plan recoge como causa “fundamental” del incumplimiento de la estabilidad “gastos extraordinarios derivados de procedimientos de gestión urbanística ejecutados con anterioridad a 2011” y recomienda el incremento de 1,8 millones del capítulo de ingresos en 2017, que vendría derivado del aumento del padrón del Impuesto de Bienes Inmuebles.
“El plan nos obliga a realizar un ligero incremento en los recibos de la contribución urbana, después de cinco años de congelación y bajada del IBI y los valores catastrales de hasta el 20%”, expresa Valverde, quien destaca que “la intención es recuperar la estabilidad presupuestaria que las cuentas locales habían perdido con cada una de las sentencias que recibimos, todavía hoy, de la época en la que gobernó el PP en la ciudad y que, por desgracia, no descartamos seguir recibiendo en los próximos años” y quien manifiesta que "a pesar de este ajuste, Vila-real seguirá siendo una de las ciudades de más de 20.000 habitantes de la provincia con el IBI más barato".
Por su parte, Benlloch, ha explicado que, desde mayo de 2011 se han pagado cerca de 16 millones de euros en sentencias de anteriores mandatos y lamenta que “no hemos acabado todavía”, ya que el documento técnico avanza ya la obligación de pago de otros 760.000 euros más intereses de una nueva sentencia urbanística durante 2016, a ello se suman otras obligaciones de pago como las de los expropiados para abrir la avenida de Francia, o el incremento exponencial del coste del tratamiento de las basuras, "que en nuestra ciudad no repercutimos en una tasa como sí hacen otros municipios”.
No obstante, el primer edil asegura que "el documento deberá ser remitido ahora al organismo de tutela financiera competente y será el Ministerio quien responda si es válido", al tiempo que felicita a todo el equipo de técnicos de la Intervención municipal, "que ha trabajado codo con codo con Alcaldia".
“A pesar de todo queremos seguir potenciando y ampliando los servicios y las infraestructuras municipales y hacer que la ciudad avance, y ello requiere de una buena planificación para poder hacer frente a los gastos que se deriven, costes a los que se suman los que marca la justicia con cada sentencia que llega al consistorio”, indica, Valverde, al tiempo que asegura que “seguiremos informando a los vecinos como siempre hemos hecho, con la máxima transparencia”.
Por otro lado, el pleno ha servido para aprobar la prórroga de dos años más del convenio firmado en 2011 con las monjas dominicas que donaba a la ciudad parte del edificio y los 3.000 metros del ahora jardín a cambio de una compensación en terrenos. Transcurrido el plazo de cinco años desde la aprobación del acuerdo, el Ayuntamiento debería abonarles el valor de los 15.000 metros de techo que los técnicos valoran en 7,7 millones, de modo que se evita este desembolso mientras se busca una solución, motivo por el que el edil de Territorio, Emilio M. Obiol, ha mostrado su agradecimiento a las dominicas por la “buena voluntad” mostrada en el proceso.
Además, en el pleno se han aprobado la cancelación de la garantía definitiva del contrato de limpieza de edificios e instalaciones municipales referida al lote de la Policía Local, a propuesta de la Concejalía de Contratación y se ha realizado el sorteo de las mesas electorales.