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Costó mucho, pero se consiguió. El Villarreal estrenó la cuenta de triunfos en el Estadio de la Cerámica tras superar al Real Valladolid en un partido donde el equipo de Javi Calleja mejoró con los cambios en la segunda parte y en el 77 logró encarrilar el partido desde los once metros. Con el gol de Santi Cazorla, tras el derribo al que fue sometido Javi Ontiveros. Y al fina tres puntos. Los primeros en casa. El martes habrá más. Contra el Barcelona en el Camp Nou.
El equipo de Javi Calleja atacó bien, pero volvió a defender mal. Su rival al cuarto de hora ya le había sacado cinco saques des esquina. Y Sergio Asenjo tuvo que aparecer en un par de ocasiones (una de ellas de para Óscar Plano, en el minuto 14) para evitar el gol de los pucelanos. Luego, a base de fútbol bien hilvanado, el Villarreal intentó ver de cerca al portero visitante Masip.
Toma y daca inicial
Así es que se podría decir que el partido arrancó con dominio de los vila-realenses (posesión de 65-35% para el equipo de la Plana Baixa), pero con mejor llegada de los vallisoletanos. Ocasiones se vieron muy pocas y goles ninguno. Estuvo a punto de llegar uno en el minuto 31, pero el colegiado interpretó una inexistente falta el ataque de Gerard Moreno que rozó el gol. Muchas protestas, pero nada.
Y se llegó al descanso con sobresalto en el minuto 47 en una acción con un remate de Sandro, cuyo remate acabó en saque de esquina, pero el colegiado no dejó que se sacara por producirse fuera de tiempo.
Sin cambios en la reanudación
Y la segunda parte arrancó sin cambios, pero con sobresalto porque a los tres minutos el visitante Sandro remató al palo de la portería de Sergio Asenjo, con un fuerte derechazo desde la frontal del área. Minutos después llegó una de las acciones más peligrosas del Villarreal. Saque de esquina botado por Santi Cazorla que Vicente Iborra cabeceó por encima del larguero.
Poco a poco se fue animando el equipo de la Plana Baixa, pero delante faltaba más mordiente. Poco a poco llegaron los cambios. Buscó más desequilibrio y velocidad con la salida del nigeriano Samu Chukwueze, en sustitución de Moi Gómez. El 1-0 llegó en el minuto 70 con un mano a mano de Toko Ekambi, tras un buen paso de Gerard, que milagrosamente salvó el portero Masip.
Otro Villarreal
A raíz de la salida de Samu Chukwueze el Villarreal parecía otro. Más profundidad, más llegada, más sensación de poder ganar el partido. Así, en el minuto 77 un derribo de Salisu a Javi Ontiveros acabó en gol. En el primer gol. Santi Cazorla no erró desde los once metros. Cambió la decoración. Luego era cuestión de dejar pasar los minutos. De no cometer error alguno para asegurar los tres primeros puntos en el Estadio de la Cerámica.
Tuvo el 2-0 el lateral Rubén Peña en el minuto 85. Zambombazo desde lejos que sólo el poste se encargó de evitar que el cuero se estrellara al fondo de las mallas de la portería de Masip. Y la sentencia llegó en el 89. Centro de Chukwueze y el remate de Javi Ontiveros sí que logró besar las mallas de la portería pucelana.
La próxima cita para el Villarreal será este martes, día 24, contra el Barcelona en el Camp Nou.
FICHA TÉCNICA:
-2- VILLARREAL: Sergio Asenjo; Rubén Peña, Albiol, Pau Torres, Xavi Quintillà; Anguissa, Vicent Iborra (Ontiveros, min. 74), Santi Cazorla, Moi Gómez (Samu Chukwueze, min. 65); Gerard Moreno y Carlos Bacca (Toko Ekambi, min. 57).
-0- REAL VALLADOLID: Masip; Pedro Porro, Kiko Olivas, Salisu, Barba; Míchel (Pablo Hervías, min. 80), Alcaraz, Antoñito, Óscar Plano (Anuar, min. 74); Sandro (Waldo Rubio, min. 65) y Sergio Guardiola.
GOLES: 1-0, min. 77: Cazorla, de penalti. 2-0, min. 89: Ontiveros.
ÁRBITRO: César Soto Grado (La Rioja). A los locales Xavi Quintilla y Vicente Iborra; y al visitante Fede Barba,
CAMPO: Estadio de la Cerámica, ante 16.195 espectadores.
