Javier Ortega “Yo no seré de los que derrame una sola lágrima el día en que se anuncie la disolución del Partido Socialista”
Entrevista con el secretario general de VOX: “Hemos pasado de un Gobierno en Funciones a un Gobierno sin Funciones”
El secretario general de VOX, Javier Ortega, no cree que se hayan solucionado los problemas con la investidura de Rajoy, y entiende que la fragmentación del Partido Socialista no ha hecho más que empezar. Se reunió con sus militantes en Castellón y se hará eco de sus quejas que pasan por denunciar la imposición de la cultura catalana, la ideología de género, y por solicitar el Plan Hidrológico Nacional así como ventajas energéticas para el sector cerámico. El representante nacional de VOX insiste en un pacto de Estado para salvar la situación de España.
Esperanza Molina /Castellón Información
El secretario general de VOX, Javier Ortega, pasó ayer por Castellón para reunirse con los militantes de su partido. Es una estrategia que se lleva a cabo periódicamente, dijo, una forma de recoger las preocupaciones, las necesidades de cada provincia, para poderlas defender como partido.
Sereno, rotundo, claro, cercano y quizá algo extenso en sus declaraciones, Javier Ortega se enfrentó a las preguntas de Castellón Información sin dudas, con respuestas que a la vez ejemplarizaba con una didáctica clara. No se escondió
Dada la coincidencia de la jornada con la dimisión de Pedro Sánchez como diputado, y la investidura de Rajoy, la situación nacional de España y la del Partido socialista en particular, eran temas obligados en la entrevista que concedió a Castellón Información.
Pregunta.- ¿Qué va a pasar en España tras la investidura de Rajoy y el desbloqueo de grupos como PSOE o Ciudadanos?
Respuesta.- “Va a continuar, desgraciadamente para España, la misma situación que antes. Antes había un Gobierno en funciones y ahora un Gobierno sin funciones. Va a haber inestabilidad. Las inversiones públicas no van a venir, en su inmensa mayoría, porque los inversores siguen pensando que en España no hay seguridad jurídica. Los empresarios de fuera de España nos dicen que España no les da confianza porque no saben si el cambio de Gobierno, como ha pasado con las Renovables, va a cambiar la ley. Dependiendo en qué comunidad autónoma quieras establecer un negocio, depende del Gobierno que haya, si están los de Podemos o los otros, va a variar… Les da miedo. Habrá gobierno Real pero no formal.
En todo caso, los que algunos han alegado durante estas campañas la necesidad del llamado voto útil, si cuando tenían mayoría absoluta no hicieron absolutamente nada, ahora, que van a estar en minoría, van a cumplir a rajatabla lo que les digan otros partidos. Al final van a hacer las mismas políticas que les impongan el Partido Socialista y que se imponga Ciudadanos. Vamos a seguir sin estabilidad, y no quepa duda de que en unos meses estamos nuevamente en Elecciones Generales porque va a ser ingobernable España”.
P.- ¿Y hubiera sido mejor convocar unas terceras elecciones?
R.- “Lamentablemente, de haberse convocado unas terceras elecciones, que es lo que en el fondo hubiera querido el Partido Popular, porque posiblemente hubiera subido votos, la realidad es que tampoco hubieran sido una solución.
La única solución es un gran pacto de Estado, que nosotros sí que hemos promovido pero no nos han escuchado, para llevar a cabo tres reformas urgentísimas en España: la primera la del sistema electoral, mediante un sistema mixto, con circunscripciones más pequeñas, elección directa del presidente del gobierno, igual que la elección de los alcaldes, y permita lograr la máxima representación posible, pero con la máxima gobernabilidad posible.
Segunda, que, a partir de ahora, la Justicia y los órganos de control de las administraciones, sean independientes de los partidos políticos..
Y tercero, un gran pacto para la reducción del gasto político, para lograr que tengamos los recursos necesarios para poder acometer todas las cuestiones que son verdaderamente urgentes en España”.
P.- De un partido político a otro… ¿cómo valora lo que ha hecho Pedro Sánchez y cómo va a repercutir en las divisiones internas del PSOE?
R.- “Como considero que el Partido Socialista, desde su mismísima fundación por ese otro Pablo Iglesias, ha hecho muchísimo daño a España… otros también pero… Yo no seré de los que derrame una sola lágrima el día en que se anuncie la disolución del Partido Socialista.
No me preocupan las siglas… ni las personas, me preocupa lo que al final revierte, si es bueno para España o no. Y yo creo que el Partido socialista no es bueno para España. Otros tampoco, pero el Partido socialista ha entrado en una fase en la que un importante grupo de afiliados y de militantes están en contra de lo que se está decidiendo por su dirección nacional; hay diferentes direcciones territoriales, los llamados ‘barones’, que unos están a favor de un modelo de partido más cercano a un modelo estatal, otros, por un partido federal y otros apoyando incluso opciones de autodeterminación. Al final lo que ellos llaman sensibilidades, que son verdaderas diferencias dentro de ese partido, y van a llevar consigo a una importante división. A medida que el Partido Socialista vaya perdiendo cuotas de poder todavía se van a aumentar mucho más las divisiones, fragmentaciones, no sabemos si el Partido Socialista de Cataluña ya se va a desmarcar como un partido ya totalmente independiente sin ninguna conexión… y lo que ha hecho Pedro Sánchez atiende no a un interés general sino a un interés particular”
P.- ¿A dónde apuntan las reivindicaciones de VOX en función de las necesidades de Castellón y de la Comunitat Valenciana?
R.- “En primer lugar, los militantes denuncian una fuerte presión de lo que nosotros llamamos el ‘pancatalanismo’. Quiero decir, la intención que algunos tienen de lo que ellos llaman los ‘paisos catalans’ de absorber la cultura, la lengua valenciana e imponerles el de otra parte de España
Esto es el fruto del sistema de las autónomas que tenemos y que permite un enfrentamiento de los españoles, donde se fomenta todo lo que nos separa, cuando nosotros pensamos que se debe fomentar todo lo que nos une.
Otro tema importante que pensamos que también afecta a la provincia de Castellon y en su conjunto a toda la Comunitat Valenciana, es la aplicación de la ideología de género.
La ideología de género se ha convertido en un arma que atenta claramente contra la libertad de los padres a la hora de elegir el modelo de educación que quieren para sus hijos, con valores donde se fomenta y se ensalza la transexualidad… o fomentar las políticas de aborto.
Y lo que significa esa carga ideológica donde va incluida también, la llamada violencia de género… para nosotros la violencia es, no tiene género…. Hay partidos que parece que lo llevan en su seno, en el ADN … pero encontrarnos que partidos como Partido Popular estén aceptando y asumiendo como propia esa ideología, es algo que no podemos comprender. Y estoy seguro, que sus votantes no lo van a entender.
Y el tercero, que no podemos obviar, es el problema del agua. El agua es un recurso imprescindible, un recurso necesario no solo para el consumo personal, sino también para el desarrollo agrícola en esta provincia tan importante; la cuestión de la naranja, la almendra. Como también para toda la industria de la cerámica, donde el agua y la energía en su conjunto, están teniendo verdaderas dificultades. ¿Por qué?, pues por la misma insolidaridad que se ha fomentado desde el sistema de comunidades autónomas.
Nosotros somos un partido que defendemos que es inaceptable que un solo litro de agua pueda estarse tirando al mar, en cualquier punto de la geografía española, mientras otros compatriotas nuestros necesiten esa agua.
Por lo tanto, proponemos y defendemos, en solitario, en toda España (porque no hay ningún otro partido que tenga la valentía de decirlo), la necesidad de un Plan Hidrológico Nacional que, con racionalidad, y por supuesto, respetando los caudales mínimos ecológicos, lleven consigo un reparto solidario del agua. No es quitarles a unos para darles a otros, es no derrochar en un sitio cuando es necesario en otro lugar.
Una cuestión relacionada con lo anterior, es la energía, que es fundamental para la industria cerámica….
“En España no hay una política que incentive mediante la fiscalidad la creación de empleos y riquezas, sino todo lo contrario. Por parte las administraciones, todo son trabas burocráticas. Todo son imposiciones fiscales. Son verdaderos héroes los que logran mantener en pie una empresa. Y no digo nada de quienes tengan el valor de contratar a alguien. En España tenemos un 20% de paro general y más del 50% de los jóvenes no consiguen su primer empleo. Estamos creando una verdadera generación de famélicos parados, gente muy preparada que no tiene acceso a un puesto de trabajo. Esa es la mejor política social que se puede hacer, un puesto de trabajo.
Es absolutamente imprescindible que se apliquen rebajas fiscales al sistema de la energía, que permitan a los empresarios crear puestos de trabajo".
P.- Aunque ustedes no crean en las autonomías, el hecho es que están. La Comunitat Valenciana ha denunciado la infrafinanciación por parte del Estado. ¿Cómo valora Vox esta reivindicación?
R.- “Es una demanda generalizada, precisamente derivada de los males de sistema autonómico, la permanente queja, el permanente victimismo, la permanente reivindicación, pero no olvidemos que la tarta es una, que la riqueza nacional es una, y hay que saberla distribuir de una manera equitativa y solidaria.
Es la permanente reivindicación de las administraciones autonómicas. Cada uno quiere más, el gran problema es que no se puede sacar de donde no hay.
Nosotros somos muy críticos con el sistema autonómico porque nos ha llevado a una triple ‘D’. a la ‘D’ de la división entre los españoles; a la duplicidad administrativa y del gasto, y al despilfarro.
Al final, el sistema autonómico hace que los recursos que tenemos se despilfarren porque que no van directamente a donde tiene que ir. Porque tienen que pasar por muchos caudales intermedios con todos los amiguismos, con todas las burocracias y con todos los organismos y cargos”.
P.- Pero este es el sistema que hay…
R.- “Si pero nosotros decimos que hay un periodo de transición con la devolución de competencias al Estado; en primer lugar tres, que consideramos fundamentales para vertebrar el Estado: Educación, Sanidad y Justicia.
Si hubiera mucho menos gasto político, habría mucho más para repartir. O sea, estar en contra del sistema actual de financiación de las comunidades autónomas es, precisamente, la razón por la cual llega menos dinero las provincias; porque se gasta en todos los cuerpos intermedios.
El modelo que propone VOX, con un único Parlamento, una única administración nacional y una administración totalmente descentralizada, sin los cuerpos intermedios, fomentado exclusivamente lo que está más cerca a los ciudadanos que son las administraciones locales, veríamos que le llegaría mucho más dinero y más recursos locales a las provincias y en concreto a los ciudadanos de esa provincia.
Entendemos que el Estado tiene dos palancas, una es la palanca del gasto y otra es la palanca de la recaudación. Hay algunos que no quieren bajar la palanca de gasto a base de aumentar la palanca de los impuestos.
Todos los partidos coinciden en un mismo consenso, que es el de: ‘no vamos a reducir un euro de los recortes políticos… no vamos a cerrar tantos y tantos puestos a dedo, tanto clientelismo político, tantísimo contratado. No vamos a tocar nada de eso, porque eso nos da votos y lo vamos a mantener a base de mantener la palanca del gasto’, es decir, aumentar la presión fiscal.
Nosotros somos contrarios, porque entendemos que si somos capaces de reducir el gasto político lograremos poder bajar la presión fiscal. Eso no significa recaudar menos. Significa que los empresarios van a poder contratar más gente, que los españoles vamos a tener más dinero para el consumo, y, sobre todo, menos fraude fiscal. Porque cuando un Estado se empeña en ahogar económicamente a las familias y a las empresas, termina recaudando menos, produciendo menos y con menos inversión productiva.
Defensa de las diputaciones
Nosotros somos uno de los únicos partidos que apostamos abiertamente por mantener las diputaciones. Porque las diputaciones ayudan a sostener los municipios que no tienen capacidad. Nosotros queremos defender la lealtad administrativa que se ha perdido, porque ahora cada ayuntamiento está compitiendo en el de al lado… es una carrera de competencia desleal, cuando deberíamos ser españoles y pensar siempre qué es lo mejor para todos”.
P.- En la situación política actual ¿Qué espacio real le queda a Vox?
R.- “No somos un partido más. Hoy en día solo dos modelos. El de aquellos partidos que han aceptado lo que nosotros denominamos el Consenso Socialdemócrata… ¿qué diferencias reales hay entre el Partido Popular y el Partido Socialista y entre Ciudadanos? Hablan de lo mismo y son capaces de defender lo mismo. Todos han aceptado un discurso donde se dice que cualquier parte de la soberanía nacional se puede discutir y se puede poner en tela de juicio; esos que aceptan la ideología del género; esos que aceptan como irremediable esa presión fiscal.
¡Y luego hay otros! Podemos, Mareas que tienen muy claro que quieren cambiar las cosas… pero quieren cambiar hacia un modelo totalitario o cercano a lo que pudo haber sido esa Venezuela de Maduro, de chaves, de Cuba…
Ante todo eso, Vox es el único partido en España que está defendiendo una justicia independiente y una división de poderes en el Estado. ¿Hay algún partido que se esté enfrentando a la ideología de género? ¿Hay algún partido que esté diciendo claramente que los derechos de los españoles son exactamente iguales, con una misma voz en Barcelona que en Madrid, Sevilla o la Coruña?
¿Hay algún partido que diga, que se tienen que terminar las subvenciones a partidos políticos a sindicatos, asociaciones?
Dígame si hay algún partido que esté defendiendo que las fronteras no tienen que ser abiertas, que necesitamos fronteras seguras y que el que venga, vega a trabajar…"
No tenemos representación política… ahora… pero yo le digo usted que lo que me ha preguntado se lo decían antes, en toda Europa, a personas, líderes de partidos políticos que ya están gobernando…
Compañeros que vinieron de Polonia a nuestro campus de verano nos decían que esa situación extraparlamentaria, era de lo que les acusaban también a ellos, y ahora ya tienen un 5% el Parlamento Polaco en menos de tres años… o lo que han hecho los húngaros…
Esto que nosotros estamos promoviendo en España, desde Vox, que es un cambio de modelo político y de modelo económico, hace pocos años se decía de otros partidos políticos europeos que hoy tienen una importantísima representación en las instituciones, en parlamentos nacionales en el Parlamento Europeo e incluso que están gobernando.
Porque solo hay dos sistemas: el que defiende el modelo tradicional, el partitocrático, que quieren mantener un sistema intervencionista, porque al final es la imposición del Estado sobre la libertad individual familiar; y el de los que creemos en el respeto la nación, en el respeto la nación, en el respeto a la libertad individual, a la economía, y al derecho a tener tu propiedad y tu beneficio como persona, sin que sea confiscado por el Estado.
Vox somos la respuesta en España a lo que ya, en el resto de Europa ha triunfado".
P.- Por sus declaraciones, se entiende que ya saben que son, por lo menos, políticamente incorrectos… ¿Les molesta que les llamen fachas o extremistas?
R.- “Si, eso es lo que nos han dicho los otros partidos de Europa que también les llamaban…
Porque queremos unas fronteras seguras, nos acusan de xenófobos. Nosotros solo podemos lo que hace cualquier otro país del mundo, proteger sus fronteras para que no entren terroristas, para que quieran entrar, lo hagan de manera legal, con contrato trabajo. Porque en España somos un país solidario, lo hemos sido siempre.
Cuando decimos que queremos defender la vida, la familia, y apostar porque ese es el suicidio demográfico que se está produciendo se invierta ayudando a que las mujeres pueden ser madres, tengan una de la conciliación de la vida laboral y familiar, nos dicen que somos unos carcas y unos fachas.
Da igual lo que digamos, siempre va a haber algunos que quieren que no se toque nada, los que nos quieren tapar. La única etiqueta que aceptamos es la de ser soberanista.
Somos soberanistas en Europa, porque no queremos que se nos diluya dentro de una Europa de burócratas, donde parece que lo único que hay es como una gigantesca empresa donde la identidad nacional de cada país tiene que desaparecer.
Y también somos soberanistas dentro de España, porque no aceptamos que la soberanía nacional que nos corresponde a todos sea decidida por una parte de la soberanía nacional, bien sea de catalanes, o vascos… defendemos la soberanía del individuo y de la familia frente a un estado que todo lo quiere controlar.
Las etiquetas que nos pongan los demás…. No nos preocupan, pero si ser valientes, defender nuestro mensaje, no caer en lo políticamente correcto, en la demagogia electoral. Lo defendemos ahora que estamos fuera y mañana, cuando estemos dentro, porque nosotros no nos movemos por intereses, nos movemos por principios, por valores".