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Tras una exigente pretemporada en la que el Villarreal B ha cosechado seis victorias, el Mini Submarino afronta con ilusión el inicio de la temporada ante el Lleida Esportiu. “Estamos muy ilusionados con este nuevo reto. La pretemporada nos ha servido para acumular minutos, pero ahora empieza lo bonito. Somos conscientes de que empezamos el campeonato en uno de los campos más complicados. El Lleida Esportiu es un rival muy complicado y nosotros tenemos un equipo prácticamente nuevo, pese a ello vamos con muchas ganas y con el objetivo de jugar concentrados”, explicó Xavi Quintillà.
En relación a la remodelación que ha sufrido el filial del Villarreal CF, el lateral izquierdo se mostró optimista: “Se han incorporado jugadores muy jóvenes que tienen mucha calidad y ganas de trabajar. Considero que la remodelación es positiva porque es un ejemplo y una oportunidad para las futuras generaciones. Es importante recordar que los jugadores que formaban el 11 titular la pasada campaña ahora están jugando con el primer equipo o se han ido cedidos a otros clubes para seguir formándose”.
Quintillà también valoró el éxito del año pasado en el que el Mini Submarino rozó el ascenso: “Las claves del año pasado fueron el trabajo diario y la humildad. En este sentido, tanto a Javi Calleja como a Miguel Álvarez les gusta mucho el trabajo, la intensidad y apostar por la gente joven, por lo que está filosofía es muy positiva para el club”.
El defensa catalán advirtió que todavía es pronto para hablar de objetivos de cara a la 2018/19: “El año pasado es un ejemplo en todo, aunque está claro que cada temporada es un reto nuevo. Ahora nuestro objetivo es trabajar cada día y mantener los pies en la tierra, porque estamos en una categoría muy difícil en la que hay muchos filiales y cada partido será un reto. Nosotros tenemos que ser un conjunto fuerte defensivamente, ya que en la delantera tenemos la calidad necesaria para hacer daño a cualquier equipo”.
