Señala que no se puede dar ningún “paso atrás” en las acciones para hacer frente a la emergencia climática porque “las consecuencias sobre las generaciones venideras serán responsabilidad de las actuales”
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha señalado que la violencia de género “representa el peor rostro de la sociedad” y ha defendido que su erradicación constituye un reto “fundamental” al que hay que responder, por lo que ha abogado por “mantener y fortalecer” el pacto existente para combatirla.
El president ha realizado estas declaraciones durante la presentación de la ‘Memoria socioeconómica y laboral de la Comunitat Valenciana 2022’ elaborada por el Comité Econòmic i Social de la Comunitat Valenciana (Cescv), que refleja un incremento de las denuncias por violencia de género en el ejercicio analizado.
El acto, que se ha celebrado en el Palau de la Generalitat, ha venido precedido de la entrega del documento al president del Consell por parte del presidente del Cescv de la Comunitat Valenciana, Arturo León, que también ha participado en la presentación de las conclusiones de la memoria anual del órgano consultivo.
“Es incomprensible que se pueda poner en duda ahora y en el futuro que esa es la gran cuestión pendiente”, ha subrayado el president sobre la violencia machista, y ha incidido además en que ningún decreto podrá acabar con ella, porque requiere de un “compromiso social”. “Por eso es tan importante mantener y fortalecer el Pacto contra la Violencia de Género y por eso es tan importante mantener la atención, sobre todo en los ámbitos educativos y en los ámbitos que hacen una sociedad más decente”, ha argumentado.
Puig se ha referido también al “desafío planetario” que supone la emergencia climática y a “esa constitución global que debería ser de obligado cumplimiento”, enmarcada en los objetivos de desarrollo sostenible, y ha agregado que “esas posiciones de avance de la humanidad”, a las que también hace mención el CES en su memoria, no pueden dar un “paso atrás”, porque, según ha subrayado, “las consecuencias de no limitar el impacto del cambio climático sobre las generaciones venideras serán responsabilidad de las actuales”.
Emancipación juvenil
Además, el president también ha fijado como otro de los retos a los que hay que atender el de continuar con las políticas que incidan en la emancipación juvenil, para la reducción del desempleo en este sector de la población y para facilitar el acceso a la vivienda.
Puig ha agradecido, por otro lado, al CES la labor realizada, que “ha enriquecido la política”, y ha hecho extensivo también su gratitud al conjunto de agentes sociales, por su “lealtad”, y a la sociedad valenciana, por su actitud “responsable”, todo ello en “un tiempo extraordinario que empezó con la resaca enorme de la Gran Recesión” y que se encadenó con una pandemia y con la guerra de Ucrania y sus consecuencias humanitarias y económicas.
“Los principios que han dirigido este tiempo son la cohesión, la ética pública y la igualdad”, ha señalado el president, que ha agregado: “si la desigualdad avanza, pierde la democracia”. “En esto no caben ni partidismos, ni divisiones, ni cálculos electorales”, porque “la causa común de nuestra sociedad ha de ser el respeto, la igualdad y la ejemplaridad”, ha defendido Puig, que también ha aludido al “papel básico” del diálogo social, de la institucionalidad y del autogobierno.
Sin el diálogo y el acuerdo no hubiera sido posible el “propósito común” que ha propiciado más cohesión y menos desigualdad, ha señalado Puig, que se ha referido a los indicadores económicos y sociales que lo avalan, especialmente en creación de empleo y fortalecimiento de las políticas de refuerzo del sistema de protección social.
